SE INVESTIGA AL HONGO Gliocadium canetulatum COMO BIOCONTROLADOR.

5 de Octubre de 2011.

Si Andrew Wylie logra su objetivo - el uso de hongos para combatir hongos en hortalizas orgánicas de invernadero enfermas - allí probablemente estará una gran cantidad de productores dándole las gracias en un futuro fin de semana de Acción de Gracias.

 El estudiante de la SFU Andrew Wylie investiga cómo combatir los hongos con hongos biocontroladores para rescatar a los tomates de invernadero y los pepinos de las enfermedades sin utilizar productos químicos.

Wylie es un estudiante de patología vegetal con la profesora de biología Zamir Punja. Él está en la búsqueda para crear una caja de herramientas de control biológico que ayudará a prosperar a los vegetales orgánicos y a los de producción convencional comercial en invernadero.

Wylie está investigando cómo utilizar el control biológico de hongos Gliocladium catenulatum para el control de otros hongos que estropean o acaban entre cinco y 50 por ciento de los tomates y los pepinos de invernadero comercial en América del Norte. Estos vegetales son los más valiosos y alcanzan los $ 1,200,000,000 comercialmente en Canadá en cultivos orgánicos y en la industria de producción convencional en invernadero.

"Gliocladium catenulatum se considera un hongo de control biológico, ya que puede acabar directamente, ser más competitivo o inhibir el crecimiento de otros", dice Wylie.
Wylie se encuentra en cooperación con las granjas de origen orgánico, el líder de la industria en el campo de la producción certificada en invernadero orgánico.

"Nuestro laboratorio está realizando un trabajo amplio sobre cómo las esporas del hongo Penicillium transportadas por el aire dañan el tomate en invernadero y cómo el hongo transmitido por el agua, Pythium, estrangula a los pepinos. Tenemos que averiguar cómo estos hongos infectan y causan enfermedades en sus huéspedes antes de que podamos recurrir a Gliocladium catenulatum como una herramienta para atacar a sus compañeros los hongos causantes de dichas enfermedades." 

Mientras que un tipo de Penicillium produce un antibiótico útil para el ser humano, otro se muestra como manchas negras desagradables en los tomates cosechados. Pythium causa una pudrición de la corona que circunda los pepinos, cortando sus nutrientes y los hace vulnerables a otras enfermedades.
Wylie se preocupa de que los márgenes comerciales en las utilidades escasas de la industria de invernaderos tentará a los productores a dar dos pasos hacia atrás en lo que se ha convertido en una tendencia generalizada en la producción de orgánicos.

"Lo que me preocupa es que estas enfermedades podrían evitarse con fungicidas sintéticos", dice Wylie, quien ayudó a desarrollar la tecnología que permite a los productores orgánicos para competir con sus primos los productores de hidropónicos.

"Es importante para el control en tomate - y pepino - atacar a los hongos y a otros agentes atacantes en invernadero mediante una mejor comprensión de sus causas y su progresión para que los controles orgánicos tengan una oportunidad de luchar. Al hacer este trabajo más difícil ahora, el impulso del movimiento orgánico se mantiene y se construye un conjunto de herramientas de soluciones sostenibles para su uso en el futuro. "

Wylie señala que el control de hongos causantes de enfermedades con microorganismos de origen natural es una herramienta importante para los productores orgánicos que quieren mantener su certificación. Pero agrega que los productores de hidropónicos convencionales están recurriendo a controles orgánicos debido a que son menos perjudiciales para el medio ambiente y puede ser menos costosos que los pesticidas sintéticos.

Fuente: Simon Fraser U., Physorg.