18 de mayo de 2010.
Por: Deborah Braconnier.
Una abeja alimenta un panal. Foto de Ketchum Lynn. |
En un nuevo estudio publicado en Apidologie, el investigador de Lausana y especialista en abejas Daniel Favre comparte sus descubrimientos sobre los campos electromagnéticos de los teléfonos celulares y sus efectos en la población de abejas. Se están realizando investigaciones en todo el mundo para tratar de explicar el fenómeno conocido como Colony Collapse Disorder (CCD), donde las abejas obreras desaparecen de una colonia y causan una disminución de las abejas, y la investigación de Favre da otra idea en ésta.
En su experimento, Favre colocó dos teléfonos celulares dentro de una colmena de abejas y fijó el equipo para grabar los sonidos de las abejas, cuando los teléfonos estaban apagados, en modo stand-by, y activo en una llamada telefónica. Después de que los teléfonos han estado durante unos 20-40 minutos, las abejas empezaron a hacer un agudo chirrido de un sonido conocido como "aflautado". Este sonido suele ser efectuado por una de las abejas de un enjambre para anunciar que la colmena está en peligro .. Sin embargo, incluso después de que el teléfono emite señales durante 20 horas y los sonidos "aflautados" continuan, las abejas dejan el enjambre. En sólo dos minutos de que los teléfonos celulares se apaguen, las abejas se calman y vuelven a su estado original.
Favre ha pedido a la comunidad científica internacional para continuar estudiando la conexión entre teléfonos celulares y los campos electromagnéticos al igual la disminución de la población de abejas.
Aunque este experimento demuestra que los teléfonos en una proximidad cercana a las colmenas pueden perturbar el normal comportamiento de las abejas, los científicos sostienen que los teléfonos celulares no se encuentran normalmente cerca de las colmenas y creen que otras causas, tales como pesticidas, los ácaros varroa, los virus, los cultivos modificados genéticamente , y de manera inusual los inviernos fríos si pueden afectarlas.
El experto en Abejas británico Norman Carreck dice que no tiene mucho peso este estudio si puede tener un enlace con la CCD, como él ha dicho que usted puede tocar o golpear una colmena y recibir el mismo resultado que muestra este experimento y en muchos casos la CCD en los Estados Unidos ha tenido lugar en áreas remotas donde las señales de teléfonos celulares no sería un problema.
Fuente: Physorg.com
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