SE DESCUBRE HORMONA VEGETAL QUE MEJORA LA BROTACIÓN DE RAMAS.

8 de Julio de 2011.

En un importante avance, biólogos vegetales de la Universidad de Queensland han identificado una hormona que juega un papel clave para determinar el tamaño y la forma de las plantas.

El descubrimiento de la hormona estrigolactona (strigolactone) podría tener un impacto enorme en la industria forestal y hortícola, y se espera que conduzca a la capacidad de diseño a medida de la forma de las plantas.
"Plantas más altas pueden ser producidas por el estimulo de la estrigolactona, y plantas más tupidas se pueden cultivar mediante la supresión de la hormona", dijo el Profesor Asociado Dr. Christine Beveridge de la UQ.

"En el caso de los árboles que producen frutas, donde el rendimiento proviene de las ramas, la represión de la sustancia - es decir, para crear más ramas - puede ayudar a obtener una mejor cosecha"
Una serie de factores trabajan juntos para determinar la forma de la planta y el tamaño, pero el descubrimiento del papel de la estrigolactona en el desarrollo y la inhibición de ramas es importante, el Dr. Beveridge, dijo, y abrió el camino para la comprensión del marco regulatorio detrás del desarrollo de la planta.

 "Es interesante que la estrigolactona utiliza un proceso de señales de larga distancia para determinar la brotación de ramas en la planta," dijo el Dr. Beveridge.
"La capacidad de la estrigolactona para tener un impacto sobre la brotación de las ramas será conducente a la obtención de la forma deseada en las plantas y es seguro que resultara beneficiosa en la producción de cultivos."

El Dr. Beveridge, quien es miembro del Consejo Australiano de Investigación, dijo que en la industria forestal la hormona podría ser manipulada para inhibir la producción de ramas y contribuir a mejorar el crecimiento del tallo y la producción de madera.
Investigadores de la Universidad de Western Australia (UWA) han detectado una sustancia química estructuralmente similar llamada karrikins en el humo que afecta la germinación de las semillas latentes después de un incendio.

 A través de investigaciones llevadas a cabo bajo el Premio Colaboración de Investigación bilateral de UQ-UWA, se encontró un gen llamado MAX2 para controlar el funcionamiento de las dos, la estrigolactona y karrikins.
El Dr. Beveridge dijo que a pesar de la similitud en la estructura de las dos hormonas y sus sistemas de respuesta similares, karrikins no afectó a la brotación de ramas.

Esto último promete alcanzar, con estas hormonas en su composición química y en otros aspectos del desarrollo de la planta, podría resultar en mejoras en la propagación de especies vegetales en peligro de extinción y de importancia económica y en la erradicación de malezas y la reforestación.
La principal empresa comercializadora de la UQ, UniQuest, está trabajando actualmente en las oportunidades de comercialización de esta tecnología.

Fuente: Physorg., U. de Queensland.